Inteligencia artificial hasta en la sopa
No se trata de una tecnología única, sino de un ecosistema amplio. Herramientas que prometen personalización, eficiencia e inclusión, pero que también acarrean riesgos: opacidad algorítmica, dependencia tecnológica, sesgos, trivialización del conocimiento y, quizá lo más preocupante, el debilitamiento de competencias esenciales como la escritura, la argumentación o la autoría crítica.